martes, septiembre 05, 2006

Seguridad Jurídica: Lo cortés no quita lo valiente.

Por: Mariano Abreu

Recientemente en los medios de comunicación nacional diferentes embajadores o representantes de países extranjeros tales como España, Francia, Gran Bretaña y Canadá, han externado su preocupación en el entendido de que Republica Dominicana tiene debilidades en materia de seguridad jurídica para la inversión extranjera que deben ser solucionadas.
Las declaraciones mas recientes la efectuó la Embajadora de España, Almudena Mazarrasa citando entre ellas la corrupción, el incumplimiento de las leyes y la violación de contrato constituyendo estos elementos que a su juicio alejan la inversión extranjera en Republica Dominicana.
En ocasiones anteriores estas representantes de gobiernos extranjeros había externado sus preocupaciones en tales puntos, sin que desde el gobierno se le responda o se concilie con ellos las quejas y sus planteamientos de posibles soluciones a las debilidades a las que se refieren.

Es oportuno sentarse en la mesa del dialogo y escuchar de manera mas concreta y detallada estas quejas y ver que como puede el Estado Dominicano, conjuntamente con los organismos nacionales e internacionales, eliminar las debilidades que tales organismos esgrimen.

Por otro lado, estos representantes de gobiernos extranjeros deberían presentar estas quejas o preocupaciones por la vía diplomática, la cual evidentemente no es aprovechar un escenario como la salida de una reunión en el despacho del Vicepresidente de la República en el Palacio Nacional y dar declaraciones a todos los medios de prensa que cubren esa fuente de información.

Quiero significar que estos embajadores tienen el derecho de manifestar sus preocupaciones pero siempre en el marco establecido por la diplomacia y muy específicamente en el caso de la Embajada de España, uno de los países que mas ha invertido en diferente renglones pilares del sostenimiento de la economía de nuestro país tales como Hotelería, comunicaciones, entre otros, pues lo cortés no quita lo valiente.