El Silencio de nuestra Historia

Por Héctor Brea G.
En República Dominicana tenemos un gran problema: Y es que la historia patria se escribe a la medida de las conveniencias políticas de sus redactores, escondiendo la verdadera personalidad de nuestros héroes y maquillando lo que a la vista no necesita anteojos.

Tenemos un sin número de héroes y políticos emblemáticos cuyo valor histórico no debemos buscarlo por la cara que se les premia. Fue Caamaño un verdaero militar constitucionalista? Muchos dicen que sí porque luchó para devolverle el poder a Juan Bosch luego de ser víctima de un golpe de estado, otros dicen que no porque desertó de su puesto consular para irse a Cuba a entrenar guerrilleros para venir por Playa Caracoles a derrocar el gobierno Constitucional de Joaquín Balaguer. Tenemos héroes que lo que escultan con las manos lo rompen con los pies.

Juan Bosch: El gran maestro de la literatura y la política dominicana sin duda hubiera sido un gran presidente pero a la vez que combatía la dictadura de Trujillo, amamantaba sus ideales de una dictadura con respaldo popular pero encabezada por él y con sus ideales marxistas. Nuestro país no asimilaba ni otra dictadura, ni una ideología comunista en el poder y los militares Trujillistas no toleraban un presidente débil de temperamento dirigiéndolos y le dieron un golpe de estado en 1962. La decepción por Bosch era tan grande que aún y cuando una gran parte del pueblo dominicano estaba lanzado a la calle reclamando la vuelta de Bosch al poder, este no tuvo el valor de retornar al pais y luchar por lo que le pertenecía, por lo que muchos estaban muriendo y dejó el destino político en manos de militares que no sabían nada de política, oportunidad aprovechada por los políticos de la oposición para junto a los Estados Unidos coserse un traje gubernamental a la medida de estos. Y no solo por eso Bosch debe ser bien analizado como líder político, sino que también, cuando Caamaño vino por Playa Caracoles a derrocar a Balaguer, esperaba contar con el apoyo de Bosch y el PRD y se quedó solo en la loma hasta morir fusilado por las tropas dominicanas. Caamaño no recibió el apoyo de Juan Bosch. Sumémosle a esto los desaciertos políticos como mandar al pueblo a votar con palos y con piedras, retirarse de elecciones cuando era el candidato a ganar y en las elecciones de 1990 Juan Bosch no defendió su victoria y pese a que Peña Gómez le ofreció su ayuda , Bosch se negó y otra vez quedó fuera del poder. Todo parece indicar que Bosch le tenía miedo al poder. Es por tal razón que analistas políticos dicen que si el PRD y el PLD hubieran seguido en manos de Bosch nunca hubieran llegado al poder.

Algún dia alguien deberá ponerse los pantalones y ser objetivo y decirle al pueblo la verdad de sus líderes políticos y de sus heroes nacionales. Que pena que en este país haya una incoherencia tan grande en la cual la ley condena el el Trujillismo pero no condena el Satanismo.