Peine en Cabello Malo

Por Hector Brea G.

Estaba escuchando hace algunos días el programa el Gobierno de la Tarde y me reí mucho cuando alguien dijo que una vez escuchó a Balaguer decir que si algún día el PLD lograba controlar el Poder Ejecutivo y el Congreso Nacional, los dominicanos iban a saber "lo que es un peine duro en pelo malo".
Ya se ha iniciado un torneo político en el cual todos los dominicanos con edad para votar y con simpatías fanáticas por algún partido político, se han lanzado a las calles a buscar para su grupo la mayor cantidad posuibles para controlar los ayuntamientos y las curules. Pero, qué le conviene al país: Un congreso compartido por las tres principales fuerzas políticas o un congreso color morado?
Si nos llebvamos del comportamiento que a través de los tiempos han demostrado los Congresistas del PLD no cabe duda que no conviene que ellos dominen el congreso. Si el PLD logra dominar el congreso todos los proyectos de leyes, préstamos y antojos del poder ejecutivo serán aprobados al vapor y proyectos sin futuro como el Metro, la Isla Artificial, la plataforma electrónica y un sinfín de reformas fiscales ajustadas a la medida de los poderosos y en perjuicio de los pobres y de la clase media serán prioridades 1-A de los peledeístas. No nos olvidemos que en gobiernos anteriores, de partidos que hoy están en la oposición, los congresistas del PLD se retiraban de las sesiones del congreso para que no hubiera quorum y las leyes y préstamos que eran prioritaros para la nación se estancaran o se engavetaran.
Este congreso actual no puede ser más complaciente con el PLD: Le ha aprobado dos reformas fiscales, varios préstamos y la aprobará un presupuetos sin que alguna bancada ni reformista ni perredeísta se haya marchado. Ahora: Usted se imagina que el congreso hubiera estado dirigido por el PLD? Hoy estuvieramos pagando ITBIS por el arroz, el café, el azúcar, la carne, la leche, las habichuelas, los combustibles estuvieran al doble de su precio actual y toda la carga impositiva la estuviera cargando la clase media y la clase baja.
Imagínes eso solamente y sentirá el peine duro en su cabeza.